Ciudad de México, 20 de noviembre de 2025.- El Colegio de la Frontera Norte (COLEF) presentó hallazgos preliminares del estudio “ACNUR en México, de la emergencia a la institucionalización, 2010-2025”, una investigación realizada con el apoyo de la Agencia de la ONU para los Refugiados.El estudio documenta los aportes del trabajo de ACNUR en la construcción del sistema de asilo en México, así como en la consolidación de las capacidades humanitarias para responder a la llegada de población refugiada y solicitante de asilo en los últimos 15 años, periodo de grandes cambios en las dinámicas de movilidad humana en la región y en las políticas en Norteamérica. Entre los principales hallazgos destaca el apoyo de ACNUR a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), sin el cual, el sistema habría visto seriamente comprometida su capacidad de respuesta frente al crecimiento exponencial de solicitudes de la condición de refugiado a partir de 2018. Entre 2018 y 2025, ACNUR aportó más de 600 millones de pesos a la COMAR. Esta contribución representó, en promedio, más del 60% del presupuesto total de la COMAR en esos años. El apoyo financiero se tradujo en un aumento de las capacidades de respuesta institucionales en materia de registro, procesamiento de solicitudes del reconocimiento de la condición de refugiado, apertura de nuevas oficinas, entre otras. Aunque los retos continúan, la COMAR es una institución más sólida que hace 10 años, lo cual ha ampliado las posibilidades de solicitar y recibir asilo en el país, así como de acceder a una integración plena.En la última década, ACNUR implementó una estrategia de asistencia humanitaria de largo alcance: entre 2022 y 2025, ACNUR firmó 133 acuerdos de asociación con organizaciones en todo el país que abarcaron distintas áreas de trabajo —asistencia legal, psicosocial, humanitaria y apoyo a albergues— con una inversión global de 1,114 millones de pesos. Esta asistencia ha servido para que miles de personas que han huido de sus países encuentren un hogar, protección e integración en las comunidades de llegada en todo el país.La presentación preliminar del estudio estuvo a cargo del Doctor Rafael Alonso Hernández, coordinador del Doctorado en Estudios de Migración del COLEF, y se dio en el marco de un conversatorio que reunió a representantes del Gobierno de México, la academia, la sociedad civil, el Sistema de las Naciones Unidas y población refugiada. El espacio permitió analizar los retos que enfrenta ACNUR en un contexto internacional desafiante y caracterizado por transformaciones profundas que han puesto a prueba al sistema humanitario global. “En este 80 aniversario de la ONU, reafirmamos un principio simple, pero poderoso: proteger a quienes buscan protección es un deber compartido. Lo fue en 1945 y lo sigue siendo hoy”, dijo Peter Grohman, Coordinador Residente del Sistema de las Naciones Unidas en México.Giovanni Lepri, Representante de ACNUR en México, advirtió de la importancia de dejar por escrito el recorrido de la Agencia en los últimos 15 años, de cara a una etapa más compleja para el sistema humanitario.“El ACNUR de enero de 2026 va a ser más liviano. Entre los varios aspectos de reducción de nuestras operaciones, no vamos a tener 35 acuerdos con socios, no tendremos tantas oficinas a lo largo del país ni la posibilidad de apoyar a los albergues como en el pasado.“Lo que hemos intentado hacer con este estudio es dar ideas de cómo, eventualmente, podemos crear un sistema donde las personas refugiadas puedan acceder a sus derechos y reconstruir su vida, lo que es posible si los actores públicos y privados trabajan juntos y en la misma dirección» indicó. El documento en extenso se publicará a fines de diciembre, mientras tanto, puede consultar el resumen ejecutivo de la investigación en esta liga.En los últimos 15 años, México pasó de ser un país de tránsito a ser, también, un país de destino, en especial para personas con necesidades de protección internacional. Lo anterior ocurrió no únicamente por los cambios en las dinámicas poblacionales, sino por la evolución del sistema de asilo mexicano y la consolidación de la asistencia humanitaria, que amplió la capacidad de recepción e integración del país. ACNUR busca que este documento sea una referencia estratégica para orientar decisiones urgentes y de alto impacto entre todos los actores involucrados en la política pública de asilo en México, a fin de asegurar una respuesta oportuna y sostenible hacia las personas refugiadas, solicitantes de asilo y desplazadas internas en México, en un entorno político y económico cambiante e incierto. |